miércoles, 27 de abril de 2022

Virgen de Monserrat

 Hoy hemos celebrado el día de la Virgen de Monserrat. Los alumnos de Infantil han hecho una ofrenda floral a la Virgen en la iglesia y los alumnos de Primer Ciclo han realizado un mural en su



 









honor.

jueves, 9 de diciembre de 2021



 Mateo 11, 11-15:

"El que tenga oídos que oiga".


Una de las figuras que llena el tiempo de Adviento es la de Juan Bautista. 

Es el hombre austero, veraz y fiel. Es quien señala a Jesús como Mesías, como Hijo de Dios y como Salvador del mundo. 

Su grandeza consiste en finalizar un largo camino de promesas de Dios y señalar la realización de esas promesas.

Juan Bautista es como la bisagra entre el Antiguo y el Nuevo Testamento. Por eso salta de gozo en el seno de su madre cuando escucha el saludo de María, la mujer nueva que lleva en su seno al hombre nuevo, que es Jesús.

Como cristianos, podemos tomar ejemplo de Juan el Bautista. 

En nuestro bautismo Dios nos llama por nuestro nombre para una misión concreta: la de anunciar también a Jesús preparando sus caminos en todos los hombres.

Ten oídos para escuchar la voz del Bautista que te señala a Jesús. 

Y ten también los labios bien dispuestos para anunciarle . 

miércoles, 8 de diciembre de 2021

 




Lucas 1, 26-38:

"María contestó: aquí está la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra".


Padre bueno, todo nos invita al agradecimiento por cuanto has hecho en María Inmaculada y quieres hacer en nosotros movido por tu infinito amor.

Te damos gracias porque podemos dirigirnos a María Inmaculada como madre y como modelo de fe. 

Como persona capaz de acoger tu palabra y siempre dispuesta a vivirla con todo su Corazón.

Gracias porque María Inmaculada trajo a Jesús al mundo y nos lo ha dado a conocer, nos ha invitado a obedecerle y ella ha sido la primera discípula. 

Que como ella sepamos estar atentos a acoger en todo momento tus proyectos. 

Que no temamos adherirnos a ellos de corazón ni digamos que hoy es imposible seguir el Evangelio de Jesús como lo hizo María, la Virgen Inmaculada. 

Ayúdanos, sobre todo, a no ver como normal ni a pactar jamás con el mal y el pecado que encontramos en el mundo y dentro de nosotros.

Que no pactemos con el egoísmo y la violencia. 

Que no nos quedemos indiferentes cuando se violan derechos humanos y se esclavizan a personas. 

Que no nos quedemos indiferentes cuando se nos invita a vivir sin fe. 

Líbranos de decir "esto ha ocurrido siempre" y que "es imposible mejorar el mundo".

Que tengamos el coraje de creer y de poner en práctica nuestra fe. 

Que como María Inmaculada hayamos preparado el camino para recibir con mayor plenitud la gracia que nos trae Jesús. 

lunes, 22 de noviembre de 2021


 Lucas 21, 1-4:

"Os aseguro que esa pobre viuda ha echado en el arca de las ofrendas más que nadie. Porque los demás han echado de lo que les sobra, pero esa, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir."


La Madre Teresa de Calcuta dijo en cierta ocasión: "Tus acciones pueden ser un grano de arena en el desierto, pero el desierto no sería lo mismo sin ese grano de arena". 

La viuda del Evangelio de hoy puede ser ese grano de arena. Su donativo en el arca de las ofrendas es insignificante. 

Pero Jesús la bendice porque "ha echado todo lo que tenía para vivir". 

Ha dado lo mejor de sí misma. Lo ha dado todo sin temor a perderlo. 

Se ha dado a sí misma. 

Nos cuesta relativamente poco dar cosas, pero nos cuesta enormemente darnos a nosotros mismos. 

Darnos en nuestro tiempo, en nuestros proyectos, en nuestros planes, en nuestra alegría, en nuestros compromisos... 

No sabemos el nombre de esta pobre viuda. Pero seguro que se ganó el cielo por unos céntimos. Era todo lo que tenía para vivir. 

Yo hoy me encomiendo a ella pidiéndole que también sepa dar lo mejor de mí mismo a la Iglesia y a todos los demás. 

Te invito a hacer lo mismo.

miércoles, 17 de noviembre de 2021



 Lucas 19, 11-28:

"Os digo: "Al que tiene se le dará, pero al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene". 


Este evangelio es una llamada a crecer siempre en favor de los demás sin dormirnos en los laureles. 

Es una invitación a reconocer los talentos que el Señor nos ha dado y es también una invitación a darle gracias por ellos. 

Reconocer y dar gracias es una forma de hacer crecer el tesoro que ha depositado en nosotros y de enriquecer también todo lo bueno que hay en nosotros. 

Y no tengas miedo de arriesgar. El siervo perezoso se llevó la bronca y el castigo de su señor porque no quiso arriesgar el talento recibido. 

El Señor también te dice a tí lo que un día le dijo a Pedro: "Rema mar adentro". 

Y acuérdate también de lo que nos dice el Papa Francisco: "Prefiero una Iglesia herida a una iglesia enferma". 

Una iglesia que negocia con todos los talentos que el Señor da a cada uno de sus miembros en favor de los demás. 

Agradece los dones que el Señor te ha concedido y hazlos fructificar el doble. 

Si los encierras, nunca ganarás nada y nunca servirán de nada para los demás. 

lunes, 8 de noviembre de 2021



 Lucas 17, 1-6:

"Si tu hermano te ofende, repréndelo; si se arrepiente, perdónalo; si te ofende siete veces en un día, y siete veces vuelve a decirte "lo siento", lo perdonarás". 


"Si tu hermano te ofende siete veces en un día, lo perdonarás". Siete veces en la biblia, quiere decir siempre. 

Si ya nos cuesta perdonar una sola vez, ¡cuánto más el perdonar siempre!. 

Necesitamos estar abiertos a la generosidad que brota de la fe en la misericordia del Padre para perdonar a fondo perdido y de todo corazón. 

Para no decir nunca eso de "yo perdono pero no olvido". 

Dios no perdona borrando lo escrito o rompiendo los papeles, sino que perdona siempre quemando y destruyendo el pecado. 

Nunca podemos permitir que el rencor o la ausencia de perdón se apoderen de nuestra vida. Cuando esto ocurre, vivimos con una carcoma por dentro que nos impide ser felices. Cuando abrimos el corazón a la comprensión, a la acogida y al perdón, renace en nosotros la alegría del Evangelio de Jesús. Experimentamos la gratuidad de su misericordia y vemos que se llenan de gozo los caminos de nuestras relaciones con los demás. 

Que el día que comienzas sea muy feliz para tí perdonando siempre a los hermanos "hasta setenta veces siete". 

martes, 2 de noviembre de 2021

 



Juan 14, 1-6:

"Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al Padre sino por mí". 


Celebramos hoy el recuerdo de todos los fieles difuntos. 

Esos que nos han precedido en el signo de la fe y que nos han enseñado a andar en la verdad y en la vida.

Los que creemos que han ido al Padre por medio de Jesús y que de alguna forma u otra han vivido estas palabras de San Agustín:

"Si corres extraviado, avanzas inútilmente. Y lo que es peor sólo caminas para fatigarte y caminas en vano. Tu error es más grande cuanto más corres fuera de camino. 

Corre, pero corre por el camino de Cristo, porque Él dijo: "YO SOY EL CAMINO". 

Corre sabiendo que llevas dirección segura, pues el mismo Cristo añadió: " YO SOY LA VERDAD".

Corre por Él, dirígete a Él y encontrarás LA VIDA.

Precisamente para que corrieses hacia Jesucristo, descendió Él hasta tí. 

Tú estabas alejado, andabas errante en países remotos y con una debilidad que no podías moverte. 

Descendió hasta tí el médico, se acercó a tí, que estabas enfermo, y el camino quedó  trazado en este valle de peregrinación. 

Anda, pues, por esa senda que es Cristo, y te salvarás". 

domingo, 17 de octubre de 2021

 

Marcos 10, 35-45:

"El que quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor y el que quiera ser primero, sea esclavo de todos. Porque el Hijo del Hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y dar su vida en rescate por muchos".


Santiago con su madre y con su hermano hacen una petición a Jesús: quieren los primeros puestos cuando Jesús reparta los "sillones" de su Reino y, consiguientemente, también le están pidiendo servidores que estén a sus órdenes y a su servicio. 

Jesús aprovecha la ocasión para enseñarles algo muy importante en el nuevo orden de cosas que conlleva su Buena y Nueva Noticia: "el que quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor y el que quiera ser primero entre vosotros, que sea vuestro esclavo". 

Procura tú ser grande y ser de los primeros en el Reino de Jesús. 

Eso quiere decir que eres grande en el servicio y que también eres el primero en servir.  

Aviva hoy en tí la conciencia y el deseo de ser misionero servidor de la Buena Noticia de Jesús.

viernes, 15 de octubre de 2021

 Esta mañana el alumnado de 1° y 2° de ESO ha asistido a la misa celebrada por D. Alfonso en la Iglesia de Nuestra Señora de Montserrat para pedir por el nuevo curso que acaba de comenzar.










domingo, 10 de octubre de 2021

 


Evangelio del día

Lectura del santo Evangelio según San Marcos 10, 17-30

En aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino, se le acercó uno corriendo, se arrodilló ante él y le preguntó:

«Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?».

Jesús le contestó:

«¿Por qué me llamas bueno? No hay nadie bueno más que Dios. Ya sabes los mandamientos: no matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no darás falso testimonio, no estafarás, honra a tu padre y a tu madre».

Él replicó:

«Maestro, todo eso lo he cumplido desde mi juventud».

Jesús se quedó mirándolo, lo amó y le dijo:

«Una cosa te falta: anda, vende lo que tienes, dáselo a los pobres, así tendrás un tesoro en el cielo, y luego ven y sígueme».

A estas palabras, él frunció el ceño y se marchó triste porque era muy rico.

Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos:

«¡Qué difícil les será entrar en el reino de Dios a los que tienen riquezas!».

Los discípulos quedaron sorprendidos de estas palabras. Pero Jesús añadió:

«Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios! Más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el reino de Dios».

Ellos se espantaron y comentaban:

«Entonces, ¿quién puede salvarse?».

Jesús se les quedó mirando y les dijo:

«Es imposible para los hombres, no para Dios. Dios lo puede todo».

Pedro se puso a decirle:

«Ya ves que nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido».

Jesús dijo:

«En verdad os digo que no hay nadie que haya dejado casa, o hermanos o hermanas, o madre o padre, o hijos o tierras, por mí y por el Evangelio, que no reciba ahora, en este tiempo, cien veces más —casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y tierras, con persecuciones— y en la edad futura, vida eterna».